domingo, 27 de marzo de 2016

Un Día Más (no es un día menos)


Tocaba sábado de relax total, a mi aire, con mis minutos y mis horas de cosecha propia. Tocaba sol urbanita, tocaba GRANADA.
Tras mirar en varias webs clásicas de carteleras de cine “cómo estaba el patio” no encontré, en principio, ningún título que me apasionara. Tiré hasta la zona de Puerta Real (Carrera de la Virgen) 


Detalle de la Fuente de las Batallas (Puerta Real)

para ver títulos y horarios en el aún almado Cine Madrigal, y reconozco que me he quedado con muchas ganas de ver Louder Than Bombs (El Amor es Más Fuerte Que Las Bombas), pero la ponían a las once de la noche y a esas horas tenía que estar en Alcalá La Real (es lo que tiene tener el coche en el purgatorio).
Me subí al barrio granaino por excelencia para desconectar y transportarme a un ayer centenario; a un ayer lleno de imprescindibles restos de cultura no arrasada por el injusto progreso de la historia y sus civilizaciones, El ALBAYZIN.

Desconectar en el Albayzin. Vas pasando por calles (cuestas la mayoría), donde el esperado sol de primavera juega al pilla-pilla entre las ramas que sobresalen de los numerosos cármenes que pueblan este legendario barrio.

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Detalle, calles del Albaycin


Azucenas, jazmines, rosas, nardos alhelíes, te hacen imaginar, lo que había, con la suavidad aromática de lo que allí hay

El Albayzin es ayer. Un ayer continuo que llena de significado el hoy en el que vivimos.
Tras empaparme de sol allá arriba, y disfrutar con laberintos en los que cualquier tipo de plano o dirección indicada me molestarían, vuelvo a la llanura de la ciudad. Saludar a los auténticos y tomarme algo en sus saloons (cervezas, vinos, tipiqueces mediterráneas, etc).

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Detalles Bar - Restaurante Boabdil


-¡Tos fueran como tu!- me dice María, la dueña del Boabdil, mientras pago y me despido de ellos. Aún quedan PERSONAS (con mayúsculas en el mundo) pensé mientras salía por la puerta.

Tan solo quedaba vincular el afternoon, que lo llaman los británicos, y nada mejor para ello que un lugar lleno de melodías de allá (a-jazz, mejor dicho… jejejeje), retratos y evocaciones a músicos míticos, entremezclados con actrices y actores de culto. ¡Si! estoy hablando del Bohemia Jazz- Café en la Plaza de Los Lobos

Detalles del BOHEMIA JAZZ - CAFÉ

Detalles del Bohemia Jazz - Café








Quedé allí con la trotamúndica Miryam Posadas, llevábamos tiempo sin vernos, y aunque fue todo muy rápido, acelerado aún más por el horario de mi medio de transporte, estuvo muy bien recordar que la amistad va más allá de relojes, calendarios, fechas en el tiempo, o situaciones concretas, la amistad es una planta sin maceta, la cual hay que dejar que se extienda a sus anchas sin poner delimitaciónes; alimentándola de vez en cuando, eso sí.
Y así de forma precipitada, muy a mi pesar, pillé un taxi hacía la estación, pensando en lo que podría haber sido esa tarde. Así me quedé con la miel en los labios por no disfrutar lo suficiente de la compañía de mi primer atardecer de primavera granaina.
                          ¡VOLVERÉ!





1 comentario:

Bea dijo...

Grande Raúl! Me has despertado las ganas de Granada y sus soles de primavera. Aunque m le quedo con "la amistad es una planta sin maceta".
Abrazos mil