miércoles, 22 de enero de 2020

¿QUÉ ME PASA DOCTOR?



Foto de archivo: Mayo del 2015. Restaurante Viva María. Granada


- ¿Cómo he pasado de pegarle bocados al mundo a mirarlo desde dentro del cristal?
- ¿Cómo ha empezado el techo a caérseme encima? 
          - ¿Cómo veo las fotos y ni me reconozco?

          - ¿Dónde ha quedado mi culinquietismo?

          - ¿Cuándo he dejado de aprender a cada paso para rumiar lo aprendido?

          - ¿Me droga la soledad?

          - ¿Sabrán mis musas, dopadas siempre hasta el culo de energía vital, que cambié de dirección?



Y así llevo una larga temporada cabreado conmigo mismo por no ser YO. 
Correr (haga frío o calor), acudir a presentaciones de libros cada semana, jazz, cines, bici, proyectos, ESCRIBIR CON PASIÓN, besar, que me besen, apuntar notas inspiradas mientras paseo por calles sin edad, etc.

Todo el mundo habla de propósitos los primeros días de enero de cada año. Yo por más vueltas que le doy me conformaría con volver a retomar ese RAÚL que tanto me gustaba hace nada. El Raúl que exprimía cada letra de su nombre como si desayunara la poción de Panoramix el druida cada día.

¡Venga que si! ¡Qué (casi) prometo que voy a poner todo lo que esté en mis manos para reencontrar "el power"! 

No es nada fácil. Admito que el desgaste físico laboral también influye. No es lo mismo la jornada intensiva que echaba antes currando en bares (la mañana o la tarde; con lo cual siempre tenía una u otra libre para todos mis menesteres personales) que las mega jornadas que me pego ahora en la tienda de alimentación comenzando de madrugada y acabando de noche. ¡Si, si! ya sé que suena a excusa pero os digo que SE NOTA MUCHÍSIMO ... la creatividad y "la molienda" no se llevan muy bien.

En fin, y dejo ya de teclear por teclear, la verdad es que me apetecía soltar falanges unos minutos, reivindicando el esfuerzo que haré; por mi que no quede. Le sacudiré las telarañas al chándal y a los avíos deportivos, reinventaré días más largos para producir más en mis hobbies habituales, untaré en áloe mi cerebro para regenerar su vitalidad y SI, volveré a VIVIR, tal vez sea ese el propósito; VOLVER A VIVIR
           


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