viernes, 7 de febrero de 2014

¡JAZZ Y EL PULGATORIO!



   Todo es brillante, de colores, lleno de risas y de, como gritaría DiCaprio encaramado a la proa del Titanic <<¡SOY EL REY DEL MUNDO!>>. Cervezas, vinos, garitos, güisqui, chupitos, risas, fotos, noche, noche... 


(hasta que...)


Pasan unos días y recoges desastres sembrados.


(Imagen de archivo - Ctra. de Charilla)




 Miércoles 5 de febrero 2014. Muerte absurda del maratoniano y multi rural "Gdenault Gdojo"

Lo malo de mis blackouts ludico-festivos es cuando empiezan a despertar las consecuencias de dichos desfases. Y, hela aquí. Me he quedado sin mi "delorean sierra sureño".

Ni zorra de la que lié el lunes a altas horas. Tan solo queda el recuerdo de una gran resaca el martes y el coche destrozado, en sus bajos, el miércoles por la mañana (cuando le di la estocada final). Convirtiendo así, un clásico y alegre día libre de libertinaje y escapadilla granadiense; en un día vacío y lleno de rabia justificada hacía mi persona. Y así fluía esa nube gris en mi cerebro en el autobús hacía la capital cultural más cercana que tengo. Y así me llamaron y me confirmaron la defunción irrefutable del cochecillo que con tan buena relación calidad-precio compré a un conocido hace años y que tantas alegrías me ha dado (nos ha dado).



(NO COMMENTS, todos recordamos la leyenda)



Everybody Loves Gdenault Gdojo



¡Es fácil que nieve!



Decenas de personas interesantes conocí. Unas entraron en mi vida pisando fuerte




Otras simplemente hicieron un viaje unidireccional

El caso es que viviendo en un pueblo limítrofe de provincias, y rodeado de belleza interior y exterior (sus aldeas, montañas, tajos, y parajes) el Gdenault me ha venido siempre de maravilla.



Descubriendo nuestra historia, nuestros alrededores


 Para eso y para "el esenteo" habitual (el que sea de fuera de Alcalá que pregunte lo que quiere decir eso)

En definitiva, y como dice mi hermano: << ¡No hay que casarse con lo material! >>. Pero claro, si ese objeto viene ligado a tanta gente, tanto compartido y tanto recorrido, pues cuesta desprenderse.

Así que ayer fue un día muy gris. 

Hasta que entrada la noche, algo comenzó a acariciar mis tímpanos, a jugar con mis células y a intentar codearse con las esquinas más tímidas de mi alma. Efectivamente, era JAZZ, el maravilloso Jaume Miquel Trio.

¡Gracias JAZZ, Gracias MAGIC Granada, Gracias Ool Ya Koo Granada Jazz  Gracias Jesús y Pepe por adentrarme cada vez más en este camino de baldosas amarillas, encontrándome paso a paso notas que me juegan con todos mis sentidos hasta el punto de adueñarse de sus funciones.


¡Tremendos!




¡GRACIAS!


Aunque no es jazz, pero es nuestro pequeño tema de despedida a ese gran viajero que tantas SenSaciones nos ha traído. ¡Ciao Gdneault Gdojo!














4 comentarios:

Anónimo dijo...

Nadie sabe porque morimos. Llegado el día es así. Simplemente dejamos de estar y de sentir. De padecer también. Si creemos en algo, nos aferramos fuertemente a ello, y así creemos que ciertamente nada muere y pervive, ya sea en el recuerdo de otros o en la esencia que dejaron en ciertos sitios y lugares de cosas y otras personas. Seguramente entre sus rojos hierros retorcidos y trocitos de pintura resquebrajada y chirriante se vislumbre la verdad de todo esto que te cuento. Y el pequeño Renault, así lo siente. Los coches tiene alma. Creeme.

ruyelcid dijo...

Conozco yo, Sr. Alfredo, un Ford KA rojo lleno de alma por los cuatro costados. Asi que estoy de acuerdo con usted. La esencia de éstos está en los recuerdos y momentos vividos.

Nono Vázquez dijo...

Recientemente padecí la pérdida de mi Ford Focus granate, que he tenido que sustituir por otro Ford blanco. Todavía no se ha hecho querer pero está en ello. Mi más sentido pésame.

Begoña dijo...

Aún recuerdo mi Austin Metro blanco, la de cosas que vivió. Se lo que has vivido con tu coche, pero ¿es que no vendrán otros?