¡Zarrapatiesta!

   ¡Madre mía! 

       Me he levantado, como últimamente viene siendo habitual, sobre las 8:10 a.m. 

       He comido un par de tapas de jamón con un poco de pan y aceite de oliva del güeno,

       y me he puesto a ver mis e-mails y el blog y tal, y me he dado cuenta del montonazo 

       minutos que se consumen pudiendo hacer otras cosas de, tal vez, mayor provecho.

 Por ejemplo: 

Haciendo esperar la guerra, golpeando un puño cerrado contra el otro con un movimiento lateral y pasando el dedo levantado de un puño a otro, estudiando formas de sacarse los pelillos de la nariz sin sufrimiento, pensando cuantas cervezas me podré beber por día en mis vacaciones, donde iré en éstas, aunque eso creo que lo tengo ya casi pensado, GALICIA, viendo la forma de aprovechar cada segundo de mi próximo miercoles, dia libre, buscando una pelotita o un hueso de goma para que Selu juegue cuando lo saco los miércoles a que foguee al campo.

En fin, lo habitual. Total, que me gusta el blog y leer cosas pero si en serio pensamos bien todo el tiempo que se nos va, y la de zebada malteada a baze de lúpulo que estamos dejando escapar en esos minutos, nos acojonariamos.

           Un abrazo.