viernes, 15 de julio de 2016

Ya lo dijo Erika Eleniak.... ¡SORPRESAAAAAAA!



¡Y yo que ya estaba tirando la toalla también con el 2016...!

2015 paso sin pena ni gloria, pasó. Breves atisvos de felicidad espurreada  propia de viajes; luz y descubrimientos geográficos, meetings y re-meetings de amistades de peso, de las "inmedibles". 
2016 no pintaba distinto (por más que cada año me tome las uvas, las doce, pida mi deseo de año nuevo, que casi siempre conlleva algo de autorrealización y algo carnal, y me convenza en silencio de mejoras inmediatas) y así estaba siendo más o menos. Sin ánimo de parecer pesimista, ni mucho menos; que yo soy de los que da gracias a "Jacob" cada día, hasta por el fresquito que entra por la ventana cuando te despiertas temprano. Pero es que desde que hace unos años me estaba viendo, como el ratoncillo enjaulado haciendo sus primeros kilómetros en la hijoputesca (pero puede que precisa) ruleta vertical que le ponen en la jaula. No hijo no.

En fin... que estaba ya de nuevo a lo "gran kahuna", con la tabla de surf esperando "la gran ola" a la altura del puente "romano" del bacotón. Ola que sabía que era muy poco probable que apareciera. No creo, por ahora, en el destino por que sí; de sopetón y gratuito. Creo en que cada uno está donde sus pasos, errados o acertados, lo han ido poniendo. El maná no caerá del cielo sin más, a no ser que nos subamos a un quinto piso, mezclemos leche y miel y la vayamos arrojando nosotros por las cuatro esquinas. Efectivamente la ola no estaba llegando.

Pero este año no "he cogido la tabla de surf" en balde. Este año las lunas inquietas han agitado la marea y las pequeñas olas han ido confluyendo en una más grande. 

Hace años, que escribo, empecé con chorradacas para mi mismo; chorradacas de inicios de blogs para mis "parroquianos" y por colectivismo/coleguismo acabamos creando un blog de relatos cortos surgido, como no, de la barra de un bar y los "maestros" que allí confluyen.

Total que a mi me gustó esto del tecleo contando historias; me fui enamorando del mundillo del relateo. Y, aquí estoy en este mes de julio del 2016, cuando, sin más, salgo de una dura mañana de trabajo, enciendo "er internet der móvil" y leo en varias notificaciones que he ganado el concurso de relato corto de la UNED (JAÉN) ... ¡Toma yaaaaaaaaa...! (casi me caí de la tabla de surf de la alegría). Autosatisfacción, inmensa alegría, y muchísimas ganas de seguir escribiendo para compartir, siempre para compartir y disfrutar con los que disfrutan leyendo las cosas que compartes, y disfrutar tambien con los que no, que también está el aprendizaje. 

Pues eso, que estoy esta mañana tecleando junto al fresquito que entra por mi ventana, "celebrando" que hacen exactamente "n" años que nací y celebrando lo bonito que es escribir, contar historias, "relatear". 

¡Por muchos años más de letras que forman palabras que se hilan en relatos!

¡Gracias a todos los que se alegran de mis alegrías! y a seguir "SURFE-ANDO"!!!!!

"... y hay que quemar el cielo si es preciso por vivir..." (Silvio Rodriguez)





¿Y mi tarta?

Erika Eleniak Saliendo de la tarta de cumpleaños. Película "Alerta Máxima"





























No hay comentarios: