domingo, 27 de junio de 2010

TÓMBOLA



La foto está tomada en mi viaje de vuelta de Santiago de Compostela a La Coruña.
Yo había ido simplemente para comprobar que un boleto, tirado en el suelo y desgastado ya, que me encontré en la Tómbola Hermanos Rivas de mi pueblo, y que guardé creyendo que podría ser de alguna pérdida o alguna mala comprobación de su comprador, pudiera tener algún premio.
Conforme me acercaba a la plaza de Santiago donde, esta vez, estaba instalada la tómbola, la esperanza se me iba transformando en cruda realidad. Una vez allí delante, miré, comprobé, esperé, revisé, volví a mirar el boleto y nada; todos mis esfuerzos habían sido en vano.
Una vez más regresaba de un luminoso "quizás" a un certero y sumiso "no".

Me cago en Marisol, en Pepa Flores y en todas las tómbolas del mundo


2 comentarios:

ruyelcid dijo...

Nota: ¡Marisol tenía rabo!

mariapán dijo...

jajajjajajajajajajajaja
jajajajajajaaja

¡nooooooooooo! Marisol tenía coleta (como mi padre) jajajajaja

Besos